El Edublog enriquece y ayuda a cohesionar más el aula (enfoque personalista de Pritchard, 2007). Consolida un “ambiente” de trabajo amable, seguro y de confianza = construcción “en equipo” del conocimiento. Entorno fundamental de trabajo (“escenarios dialógicos vivos, dinámicos, críticos y flexibles”, Sánchez y Suárez-Robaina, 2019): el diseño de 2 h del tiempo semanal presencial dedicado al trabajo acompañado con el Edublog = acercamiento al marco docente combinado o mixto, blended).
Participa del principio de la practicidad de la enseñanza y del learning by doing de Dewey (2007) y Schank (2005) respectivamente.
Favorece el compartir afinidades e intercambiar posturas al generar un marco de aprendizaje significativo, amable, democrático (Suárez-Robaina, 2012), que se nutre del barniz mágico de lo “público” y de lo escrito “para los demás” (Sánchez, 2010).
Se alinea y armoniza por tanto con el aprendizaje como forma de interactuar con el mundo (Biggs, 2005).
Su implementación en los niveles universitarios que forman profesorado (Grado y Posgrado) ha permitido un “ejercicio metacognitivo en torno a la propia praxis docente” (Suárez-Robaina, 2018).
Incide en el diagnóstico y mejora de las competencias digitales del profesorado (Marco Común de Competencia Digital Docente, 2017, 2022).
Oportunidad (para el practicante) de descubrir habilidades en torno a nuevas prácticas letradas (Cassany, 2012).
Oportunidad (para el mediador) valorar el trabajo y los avances a partir de interacciones auténticas (in situ).
Nuevo paisaje comunicativo del aula… contribución a la educación centrada en el sujeto que aprende (Proyecto/Enfoque Tuning, 2000, 2006).
Responde, finalmente, a las ventajas de la actividad docente mediada por las TIC: motivación, interactividad, enfoques activos, organización grupal dinámica… (Sáez, 2012) y a la consolidación de la secuencia TIC-TAC-TEP-TRIC.
